Alcaraván picogrueso australiano

El alcaraván picogrueso australiano también se conoce como alcaraván grande australiano o alcaraván de playa. Es el ave limícola más grande del mundo. Mide unos 55 cm de largo y pesa alrededor de 1 kg. Se puede encontrar en diversos puntos del planeta: las islas del Sudeste Asiático, India, la costa este de Australia, así como al sur y este de Victoria, la costa norte australiana y las islas cercanas, como Nueva Guinea, Nueva Caledonia, Indonesia, Malasia y las Filipinas.

El alcaraván australiano es la ave costera más pesada del mundo
El alcaraván picogrueso australiano es el ave limícola más grande del mundo.

Es un ave limícola muy grande. Los adultos tienen una cabeza grande, un gran pico que curvado hacia arriba, una postura encorvada, patas fuertes y rodillas anchas. De hecho, estas “rodillas anchas” son los tobillos. El torso es principalmente de un color gris amarronado. La cara, los hombros y las alas secundarias tienen un diseño blanco y negro. El cuello y el pecho son de un gris amarronado más pálido. El vientre es blanco, al igual que las alas, que presentan algo de negro en las extremidades. El gran pico de estas aves es amarillo en la base y negro en la punta. Sus ojos son amarillos grandes y un parche ancho con franjas blancas por encima y por debajo de los ojos.

Les encanta estar en playas abiertas tranquilas, arrecifes expuestos, manglares y marismas. Se alimentan de día y de noche. Se mueven lentamente y a veces pueden correr cortas distancias. Cazan cangrejos y otras criaturas marinas en marismas y fosos de arena. Emiten un sonido similar a un llanto. Sitúan sus nidos en fosos de arena o en islas de estuarios, entre los manglares o en la arena del pastizal.

La hembra pone un solo huevo cada temporada. Sin embargo, si se da cuenta de que ha perdido su primer huevo, puede poner un segundo. ¿No es interesante? Una vez que el polluelo ha nacido, los padres lo cuidarán hasta que tenga entre 7 y 12 meses de vida.

Estas aves están clasificadas en vías de extinción en Nueva Gales del Sur. Su población se ha visto afectada por la pérdida de su hábitat, causada por la construcción de casas y fábricas cerca de donde viven.